El funcionamiento de la pantalla del ordenador es algo esencial para una buena experiencia de uso. Por eso, tenemos que asegurarnos de que diversos parámetros en la misma funcionan de manera correcta. Uno de ellos, uno de los más importantes de hecho, es el brillo de la pantalla. Puede que en muchas ocasiones no esté ajustado de la manera adecuada. Os mostramos cómo se hace esto en Windows 10.
Ya que en Windows 10 tenemos varias maneras de poder ajustar dicho brillo y hacer que aumente. De modo que obtenemos una mejor experiencia de uso, gracias a que la pantalla representa mejor los colores o tiene una mayor luminosidad en todo momento.
La falta de brillo en la pantalla es un problema de lo más común en los ordenadores. En muchos casos, basta con simplemente aumentar el brillo en la misma y el problema queda solucionado. Aunque en otros casos esto no basta, de modo que tenemos que recurrir a otros métodos, como calibrar nuevamente la pantalla del ordenador o cambiar la configuración de brillo en el panel de gráficos de nuestro ordenador.
Aumentar brillo en la configuración de Windows 10
El primer método al que podemos recurrir es el más sencillo de todos. Dentro de la configuración de Windows 10 tenemos muchas opciones, algunas de las cuales hacen referencia a la pantalla del ordenador. Entre ellas la posibilidad de aumentar el brillo de la misma. Por lo que podemos conseguir esto directamente en la misma. Así que es la opción más cómoda.
Abrimos la configuración de Windows 10 y entramos en el apartado de sistema. A continuación, nos fijamos en la parte izquierda de la pantalla, donde tenemos una serie de apartados. Uno de ellos es el de Pantalla, donde vamos a pulsar. Entonces nos saldrán ya las opciones del mismo en el centro, donde veremos que una de ellas es la del brillo.
Solo tenemos que ir deslizando dicha barra para obtener el brillo de pantalla deseado en Windows 10. Podemos ir probando hasta encontrar el que nos parece más adecuado en nuestro caso. Además, la parte positiva es que esto es algo que podemos cambiar siempre que queramos. Así que si consideramos que el brillo es bajo, lo podemos aumentar de esta manera.
Configuración de gráficos
Otro sistema al que podemos recurrir es usar la configuración de gráficos de dicho portátil. Se trata de un método que nos permite configurar los colores y el brillo de la pantalla de una forma algo más precisa, con opciones que no tenemos disponibles normalmente en la configuración de Windows 10. Por lo que es un método algo más completo, si el problema del brillo es complejo o no sirve solamente aumentar el brillo.
Lo normal es que podamos acceder haciendo clic derecho en la pantalla en el escritorio. En función de la marca se llamará de una manera, pero suele ser Panel de gráficos o configuración de gráficos. Al entrar elegimos la opción de pantalla y tendremos una serie de opciones de configuración disponibles en este sentido. Una de ellas es la configuración de color, donde poder elegir los colores (la intensidad de los tonos) y la posibilidad de ajustar el brillo o el contraste de la pantalla en todo momento. Así que podemos ajustar esto en función de lo que necesitemos. Sobre todo a la hora de jugar o ver películas es posible que haya que cambiarlo.
En este apartado es cuestión de ir ajustando los valores, de modo que obtengamos el resultado ideal. Todos los cambios son siempre modificables y si no nos convencen, podemos cancelarlos y que regrese al estado original. De manera que podemos configurar de una forma bastante simple estos aspectos en Windows 10. Simplemente hay que ir consultando qué opciones son las más adecuadas en dicho caso, en función de tu pantalla. Se puede modificar siempre que queramos, por lo que si lo has cambiado y luego no estás satisfecho, siempre se podrá reajustar esta función en la pantalla de tu ordenador.