El administrador de tareas es una herramienta que usamos de manera habitual en nuestro ordenador. Gracias al mismo podemos cerrar un programa que se ha bloqueado. También nos permite ver el estado de la CPU o GPU, como el porcentaje de uso de las mismas. Así que es algo a lo que le sacamos mucho partido en un ordenador en todo momento.
El administrador de tareas nos da estos datos en tiempo real. Aunque si hay cambios bruscos en el uso de CPU, por ejemplo, tarda un poco en actualizarse. Por lo que podemos perdernos algunos detalles en ocasiones. La solución en este caso es modificar la velocidad de actualización del mismo.
Al hacer esto, permitimos que el administrador de tareas se vaya a actualizar con mayor rapidez, permitiendo que los datos que se ofrecen sean más fiables en todo momento. Así no nos perdemos detalle, sobre todo en el caso de estar comprobando el uso de CPU en nuestro ordenador, que es un dato que varía por segundos.
Para que esto sea posible, tendremos que abrir primero el administrador. Usamos la combinación de teclas CTRL+ALT+DEL y elegimos la opción correspondiente en este caso. Pasados unos segundos lo vamos a tener ya en la pantalla de nuestro ordenador disponible.
En la parte superior nos encontramos con varias pestañas. Una de ellas es la de vista, sobre la que vamos a pulsar en este caso. Nos saldrá un pequeño menú contextual con varias opciones, de las cuales una es la de Velocidad de actualización. Como queremos que el administrador de tareas se actualice rápido, elegimos alta.
Ya podemos salir del administrador de tareas, si queremos, pero lo que pasa de esta manera es que cuando lo usemos, los datos se actualizarán con mayor velocidad, lo que nos va a permitir ver todos estos cambios que haya, como en el consumo de CPU, de forma clara en todo momento y así poder seguir este tipo de situaciones mejor.