Por defecto, los iconos de nuestro escritorio en Windows 10 vienen con un tamaño concreto. Aunque este tamaño no gusta a todos los usuarios. Hay personas a las que les parecen demasiado pequeños y a otros les parecen grandes. Por suerte, tenemos la posibilidad de cambiar su tamaño de una forma sencilla, y así terminar con este problema.
Es lo que os vamos a mostrar a continuación. Los pasos que tenemos que llevar a cabo para cambiar el tamaño de los iconos en Windows 10. De forma que si no estáis contentos con el mismo, los vais a poder hacer más grandes o más pequeños.
Si lo queremos hacer con los iconos del escritorio, los pasos son muy sencillos. Acudimos al escritorio de Windows 10, y pulsamos con el clic derecho del ratón en el fondo del mismo. Nos saldrá a continuación un menú con diversas opciones. La que nos interesa a nosotros es la primera de la lista, que es la opción de ver.
En la misma nos encontramos con la posibilidad de cambiar el tamaño de los iconos. Los podemos ver más grandes, más pequeños o el tamaño actual. Así que seleccionamos la opción que nos interesa a nosotros en este caso. Y veremos como de inmediato cambia el tamaño de estos iconos en el escritorio.
También podemos cambiar el tamaño de los iconos del explorador de archivos de Windows 10. En este caso, acudimos al explorador de archivos. En la parte superior nos tenemos que fijar en la opción de «vista». Pulsamos en la misma y nos saldrán en la parte superior del explorador las opciones de vista.
Entre ellas tenemos la posibilidad de cambiar el tamaño de los iconos. Podemos seleccionar entre varias opciones, apostando porque sean más grandes o más pequeños. Elegid la que os parezca más cómoda a vosotros en dicho momento. Siempre que queramos lo podemos cambiar.