VLC es posiblemente el reproductor multimedia más popular de los últimos años. Se ha sabido hacer un hueco en el mercado, gracias a que tiene muchas ventajas que otros no ofrecen. Uno de los puntos fuertes del mismo es su compatibilidad con todo tipo de formatos. Podemos reproducir todo tipo de archivos de vídeo y audio en el mismo.
Además, una función que posiblemente muchos usuarios no conocen, es que gracias a VLC podemos convertir formatos. De modo que si tienes un archivo de audio o vídeo que quieres convertir, porque lo vas a mandar o reproducir en otro dispositivo, puedes usar este programa para convertirlo en dicho formato.
Es un proceso sencillo de conseguir, que nos permite tener archivos en un formato que nosotros queramos. De esta manera, si tienes un archivo en un formato que no puedes reproducir en todos tus dispositivos, siempre puedes usar la función de convertir formatos. Es fácil de usar y tiene una enorme utilidad, ya que la podemos usar con archivos de vídeo y audio sin problema alguno.
Convertir formatos con VLC
Tenemos que abrir dicho archivo con VLC en primer lugar, ya sea un vídeo o una pista de audio. Aunque podemos abrir también el programa, sin tener que abrir el archivo, las dos opciones son posibles en este caso. Cuando tengamos el programa en la pantalla del ordenador, pulsamos en la opción de medio, situada en la parte superior izquierda de la pantalla. Saldrá un menú contextual en la misma, donde tenemos todo tipo de opciones disponibles. Una de las opciones que podemos usar en dicho momento es la de convertir, sobre la que vamos a tener que pulsar en este caso.
Se abre entonces una nueva ventana en la pantalla, donde podemos empezar con el proceso de conversión de dicha pista de audio. Entonces, pulsamos en el botón de añadir, en caso de que no hayamos abierto este archivo en VLC. Si has abierto el archivo usando el programa no tendrás que llevar a cabo este paso intermedio. A continuación elegimos el archivo que deseamos convertir de alguna carpeta en nuestro ordenador, para que se lleve a cabo el proceso.
Una vez añadido dicho archivo, en la parte inferior de esta ventana tenemos la opción Convertir/Guardar, sobre la que hay que pulsar. Saldrán unas opciones en un pequeño menú contextual, de la que nos interesa la función de convertir en este caso. A continuación, VLC nos lleva a la siguiente ventana, donde poder determinar el formato del archivo que queremos. Tenemos en la misma un apartado llamado perfil. Pulsamos en el mismo y veremos que sale un listado con todo tipo de archivos, que podemos elegir, para que sean el formato al que se convertirá dicho fichero.
Entonces, solo es cuestión de elegir un formato que queremos usar en este caso. Cuando lo hayamos elegido, solo tenemos que pulsar sobre el botón de Iniciar, de manera que VLC vaya a dar comienzo al proceso de conversión de dicho archivo. Pasados unos segundos, el archivo en cuestión se va a convertir en el formato que queremos. De modo que ya podemos hacer lo que queramos con el mismo en todo momento. Muy cómodo de usar y así usar este archivo en otros dispositivos o programas, en los que tengamos menos problemas con este nuevo formato.
Si en algún momento quieres cambiarlo de nuevo al formato original, es posible. Lo normal es que VLC tenga estos formatos siempre disponibles, de modo que podrás llevar a cabo el proceso todas las veces que quieras sin demasiados problemas. Así que es muy sencillo de poder llevar a cabo usando esta herramienta. La puedes descargar de manera gratuita en tu ordenador, como probablemente ya sabes. Así que es una buena opción a tener en cuenta, por ser gratis y muy fácil de usar, además de tener una enorme cantidad de funciones de interés para nosotros.