Windows 10 ha sido siempre una versión que da a los usuarios muchas posibilidades de personalización. Esta es una de sus grandes ventajas, que ayuda sin duda a un mejor uso en todo momento. Los usuarios que quieran, tienen la posibilidad de cambiar las fuentes que se usan en el sistema operativo. De modo que se use un tipo de letra que consideran apropiado.
La nueva actualización de Windows 10 ha introducido cambios en este sentido. Se introduce una nueva manera de instalar fuentes en el sistema operativo, que es mucho más fácil que la anterior. Además, la gestión de las mismas es también muy sencilla ahora en el sistema operativo. Esto es lo que hay que hacer.
Instalar fuentes en Windows 10
El proceso en sí de instalar fuentes en Windows 10 no ha cambiado nada, simplemente se ha facilitado de manera notable el último paso. Tenemos que entrar en primer lugar en la configuración y luego acudimos al apartado de personalización. Dentro del mismo nos fijamos en la columna que hay en la izquierda de la pantalla, y elegimos la opción de fuentes en este caso. Para que se abran las opciones en pantalla.
Ahora, con la actualización de mayo del sistema operativo, podemos ver que sale directamente la posibilidad de agregar nuevas fuentes. Simplemente hay que pulsar, para que nos lleve a la Microsoft Store, donde vamos a poder descargar todas las fuentes que queramos. Simplemente es cuestión de elegir alguna en este sentido. Por tanto, una vez elegida una, solo tenemos que descargarla.
A continuación, si la queremos usar, solo tenemos que acudir a este apartado de fuentes. Allí nos saldrán todas las fuentes que tenemos disponibles, tanto las que venían por defecto en el ordenador como las que nosotros mismos hemos instalado en este caso.
Gestionar fuentes
En el apartado de Fuentes nos encontramos con la sección de Fuentes disponibles. Este apartado muestra las fuentes que vienen por defecto en Windows 10, que son bastantes, además de aquellas que nosotros hayamos descargado. Es probable que en un momento determinado quieras cambiar de fuente en el ordenador. Cuando llega dicho momento, solo hay que elegir una fuente que quieras usar, de las que hay disponibles.
Solo tienes que pulsar sobre ella, para entrar en una nueva pantalla, en la que será posible llevar a cabo ciertos aspectos de configuración. Cada tipo de letra es diferente, por eso, hay algunas que tienen que tener un tamaño mayor, para una buena visualización. En esta pantalla podemos configurar esto, de modo que vayamos a poder usar esta fuente en Windows 10 de una forma que resulte cómoda para nosotros en todo momento. Si bien siempre tenemos la posibilidad de realizar dichos ajustes.
Cuando lo hayamos configurado todo, ya podemos salir de dicha ventana. Se habrán introducido las modificaciones que hayamos elegido, como cambiar el tamaño de dicha letra en el ordenador. Es realmente fácil tener una buena gestión de las fuentes en el ordenador de esta manera. Así, se obtiene un uso más personalizado de Windows 1o
Desinstalar fuentes
Es probable que haya fuentes que no te gustan o que has dejado de usar y no tienes intención de usar más. Windows 10 nos ofrece la posibilidad de desinstalar aquellas fuentes que no queramos. El procedimiento en este sentido es muy simple. Solo tenemos que entrar en la fuente que queramos desinstalar. En el mismo menú donde hemos cambiado antes su tamaño, tenemos también la opción de eliminarla de nuestro ordenador.
Esto es algo que podemos hacer con cualquier fuente, pero es bueno pensar si la queremos eliminar o no. Hay veces que puede que pensemos que una fuente no es de interés, la eliminamos y luego no sabemos cómo recuperarla. Así que es bueno no tener que usar esta opción demasiado en el ordenador, para evitar perder una fuente que puede luego queramos usar. O si eliminamos por error una que sí nos gustaba en Windows 10.