La pantalla azul de error en Windows nos lleva acompañando desde Windows 98, cuando Microsoft implementó este sistema de información al usuario que confirma que algo no funciona como debería. En el 90%, por no decir el 100%, de los casos, siempre se trata de un problema relacionado con el hardware del equipo.
La pantalla azul de Windows se puede mostrar en dos ocasiones: cuando encendemos el equipo o bien haciendo un uso habitual de nuestro equipo. Dependiendo de la situación desde Microsoft nos ofrecen dos soluciones a través de su página web, por lo tanto, es la mejor solución para poder deshacernos de este problema.
Si te encuentras con la pantalla azul de Windows 10, esta va acompañada de diversos códigos de error como: CRITICAL_PROCESS_DIED, SYSTEM_THREAD_EXCEPTION_NOT_HANDLED, IRQL_NOT_LESS_OR_EQUAL, VIDEO_TDR_TIMEOUT_DETECTED, PAGE_FAULT_IN_NONPAGED_AREA, SYSTEM_SERVICE_EXCEPTION, DPC_WATCHDOG_VIOLATION, 0x0000000A, 0x0000003B, 0x000000EF, 0x00000133, 0x000000D1, 0x1000007E, 0xC000021A, 0x0000007B, 0xC000000F entre otros.
Dependiendo de cuando se muestre este error tras instalar una actualización, al utilizar el dispositivo de forma habitual tenemos que seguir dos caminos.
Después de instalar una actualización
Si es este el caso, nos veremos obligados a iniciar nuestro equipo en modo prueba de fallos desactivando todos los drivers y software no esencial para poder iniciar nuestro equipo y eliminar la última actualización que se ha instalado.
Utilizando el dispositivo de forma habitual
Si es este el caso, lo más probable es que se deba a una actualización de los drivers de algún componente de nuestro equipo. Esto nos obligará a eliminar el dispositivo y volver a instalarlo con los drivers de fabricante directamente, no con los que nos ofrece Windows de forma nativa.
Para evitar este tipo de problemas, lo mejor que podemos hacer es tener siempre instalados los últimos drivers de todos los componentes de nuestro equipo.