La asistencia rápida es algo que no lleva demasiado tiempo presente en Windows, si bien es algo de gran utilidad. Ya que podemos hacer uso de la misma para solucionar problemas con el ordenador, o ayudar a otra persona que tenga un problema. Por lo que nos puede sacar de más de un apuro. Es una forma sencilla para poder solucionar posibles problemas de rendimiento.
Pero, para poder usar esta asistencia rápida en nuestro equipo debemos seguir unos cuantos pasos. De esta manera, vamos a poder hacer uso de la misma sin problema alguno y así, en caso de que tengamos un problema o queramos ayudar a alguien, la podremos usar.
Lo primero que tenemos que hacer es buscar la propia aplicación en el ordenador. Para ello, introducimos asistencia rápida en la barra de búsquedas que tenemos en la barra de tareas y nos saldrá la aplicación. Simplemente tenemos que abrirla. En esta ventana de la aplicación nos saldrán varias opciones, tenemos que seleccionar la que nos convenga, si necesitamos ayuda o proporcionamos. Suponed que es la segunda, pulsad en proporcionar asistencia.
Tenemos que iniciar sesión en nuestra cuenta de Microsoft a continuación y se generará un código de seis cifras. Este código se lo tenemos que proporcionar a la persona que va a recibir asistencia de nuestra parte. Hay que ser rápidos, porque el código caduca a los 10 minutos.
Mientras tanto, la otra persona debe lanzar la aplicación y seleccionar la opción de recibir asistencia e introducir este código que nos han dado. A continuación se deben dar los permisos de compartir pantalla y de esta manera estamos ya en la pantalla del otro usuario.
Con estos pasos hemos activado ya la asistencia rápida y vamos a poder ayudar a un amigo o familiar que tenga problemas con el ordenador. Como podéis ver, los pasos a seguir son muy sencillos y se trata de una función de enorme utilidad. Por lo que no dudéis en hacer uso de la misma en caso de ser necesario.