Hay aplicaciones que parecen eternas, y Microsoft Paint es una de ellas: un clásico que lleva décadas acompañándonos en Windows y que, pese a su sencillez, ha sabido modernizarse. En esa evolución se enmarca la llegada del modo oscuro al editor de imágenes más icónico de Windows, una novedad muy esperada que encaja con el estilo visual de las versiones recientes del sistema.
Durante años muchos usuarios echaron de menos esta opción y recurrían a apaños poco intuitivos. Ahora, con la integración nativa del tema oscuro, la interfaz de Paint puede adaptarse al entorno del sistema o configurarse manualmente. Esta mejora no llega sola: se suman controles de zoom más flexibles, cuadros de diálogo renovados y mejores atajos de teclado para trabajar de forma más cómoda, especialmente en Windows 11.
Qué aporta el modo oscuro en Paint y por qué interesa
El modo oscuro no es solo una moda: cuando la interfaz pasa a tonos oscuros y los elementos se contrastan con acentos de color, la vista se resiente menos en entornos con poca luz. En Paint, este cambio afecta a su marco, barras de herramientas y cuadros de diálogo, con una ejecución que busca hueco junto a otras apps de Microsoft que ya lo hacen bien, como Fotos o Clipchamp, que lucen perfectamente en tema oscuro.
Quien haya trabajado de noche en pantalla brillante sabe que un tema claro puede resultar molesto. Gracias a esta integración, Paint se vuelve más “amigable” con la vista y coherente con el resto de Windows 11. Microsoft ha ido puliendo inconsistencias visuales del sistema, y aunque aún quedan detalles dispersos, el rediseño de Paint y su tema oscuro ayudan a unificar el lenguaje visual del entorno.
Además de confort, hay una cuestión de continuidad: si el sistema está en modo oscuro, lo natural es que todas las apps sigan esa preferencia. Justo ese era el problema de antaño, cuando Paint se quedaba descolgado y rompía la estética. Con la actualización, la app puede heredar el tema del sistema o forzarlo a tu gusto, evitando saltos visuales entre ventanas.

Requisitos y versiones compatibles
Para disfrutar del tema oscuro de forma estable necesitas una versión reciente de la aplicación. Microsoft indica que a partir de la versión 11.2304.17.0 de Paint la compatibilidad con modo oscuro está totalmente operativa. Ahora bien, como sucede con muchos despliegues progresivos, puede que no llegue a todos los equipos al mismo tiempo.
La vía más sencilla para actualizar es la Microsoft Store. Abre la tienda, usa la búsqueda para localizar “Microsoft Paint” y aplica la actualización disponible. Si lo necesitas, puedes introducir también el número de versión en el buscador para afinar. En algunos casos, Microsoft facilita un enlace directo en la tienda para la actualización de Paint, por lo que también conviene revisar las notificaciones de Windows Update y las actualizaciones de apps de la Store.
Si estás en los canales de pruebas de Windows (Dev o Canary), tendrás antes que nadie algunas novedades adicionales. Eso sí, como recuerda Microsoft en su blog, lo que se valida en los canales Insider puede variar cuando llegue al público general: funciones que cambian, detalles que se pulen o tiempos de despliegue distintos.
Cómo activar el modo oscuro desde Windows (tema del sistema)
Si prefieres que todas tus aplicaciones sigan el mismo estilo, puedes activar el tema oscuro en Windows para que Paint se adapte automáticamente. Esta opción unifica la apariencia del sistema y de las apps compatibles. El proceso es simple y aplica a nivel global:
- Abre Configuración desde el buscador y entra en el apartado Personalización.
- Accede a la sección Colores y, en “Elige tu modo”, selecciona Oscuro en lugar de Claro.
- Las aplicaciones que respetan el tema del sistema cambiarán su apariencia de inmediato. Paint heredará el modo que tengas activo.
- Si no notas cambios, asegúrate de que Paint esté actualizado y reinicia la app para que aplique el nuevo tema.
Este enfoque es perfecto si quieres consistencia y no andar configurando cada app por separado. Por ejemplo, si sueles alternar entre tema claro y oscuro según la hora del día, Paint se sincronizará con esa preferencia sin que tengas que abrir sus opciones. En la práctica, todo tu escritorio se mantendrá visualmente alineado.
Cómo activar el modo oscuro solo en Paint (sin cambiar Windows)
¿Prefieres no tocar el tema de Windows? No hay problema. Paint permite fijar su apariencia de forma independiente. Esto resulta útil si te gusta el sistema en claro, pero deseas reducir el brillo del editor de imágenes mientras retocas capturas o dibujas.
Para activarlo directamente en la aplicación, sigue estos pasos rápidos dentro de Paint, sin modificar la configuración general del sistema:
- Abre Microsoft Paint y busca el icono de ajustes en la esquina superior derecha (el habitual engranaje de configuración).
- Dentro del menú de opciones, entra en el apartado de Apariencia.
- Selecciona “Oscuro” para forzar el tema oscuro, o “Ajustes del sistema” si quieres que Paint cambie automáticamente según el tema de Windows.
- La interfaz pasará a negro con el modo oscuro y volverá a blanco si eliges el claro. Puedes alternar cuando quieras según tus preferencias.
Esta configuración te da control fino sobre el editor, y resulta muy cómoda en equipos compartidos o cuando necesitas ajustar el entorno de trabajo a una tarea concreta sin alterar todo Windows. Piensa en momentos de edición prolongada o revisiones nocturnas, donde la tonalidad oscura reduce el cansancio visual.

Novedades añadidas: zoom flexible, cuadros de diálogo y accesibilidad
La llegada del modo oscuro ha venido acompañada de cambios prácticos. Microsoft ha actualizado los controles de zoom en Paint para que tengas más margen de maniobra al encuadrar y revisar el lienzo. Ahora puedes alternar entre niveles predefinidos, manipular un control deslizante o introducir valores personalizados.
Una mejora especialmente útil es el ajuste del zoom al tamaño de la ventana: con un clic, la vista se optimiza para que el contenido se adapte impecablemente al espacio disponible. Si trabajas con diversas resoluciones o redimensionas la ventana con frecuencia, esta función te ahorra varios pasos y te permite concentrarte en el dibujo o la edición.
También se han rediseñado los cuadros de diálogo de “Propiedades de imagen” para alinearse mejor con el lenguaje visual de Windows 11. Esto no solo es estética: hay retoques de usabilidad y accesibilidad en los campos de texto, lo que facilita introducir dimensiones, cambiar la resolución o modificar atributos del lienzo con más claridad.
La accesibilidad también gana peso. Microsoft detalla que han afinado las teclas de acceso y métodos abreviados por toda la app. Para quienes prefieren el teclado o necesitan evitar el ratón, esta mejora agiliza acciones frecuentes, como cambiar de herramienta, conmutar opciones o moverse por la interfaz más rápido.
En conjunto, estas novedades elevan a Paint por encima de “lo básico” sin perder su esencia. No hablamos de convertirlo en un editor profesional, sino de pulir la experiencia para que sea más coherente, cómoda y eficiente en tareas del día a día.
Disponibilidad: canales Insider y llegada al público general
Microsoft anunció el rediseño de Paint con modo oscuro ya en 2021 y, tras varias iteraciones, la versión con tema oscuro y las funciones anexas han ido aterrizando en los canales Dev y Canary de Windows Insider. Quienes participan en estos programas suelen recibir funciones antes que el resto para validar su comportamiento.
Es importante tener en cuenta que lo que ves en Insider no siempre llega idéntico a la versión pública. Microsoft puede ajustar detalles, posponer cambios o escalonar la distribución. Aun así, cuando una novedad se asienta en Insider, es una señal fiable de que su integración en la versión estable está en camino, por lo general en semanas o meses.
Junto a Paint, otras aplicaciones del ecosistema de Windows han recibido o están recibiendo su propio tema oscuro nativo, como el Bloc de notas, el Administrador de tareas o el Explorador de archivos. Es parte del esfuerzo general por homogeneizar diseño y comportamiento, y por eso tiene sentido que Paint, una herramienta tan visible, se sume con todas las de la ley.
Un Paint más coherente con Windows 11
Durante años se criticó la “inconsistencia estética” de Windows: ventanas con estilos distintos, menús con lenguajes visuales mezclados… Windows 11 ha avanzado en unificar esa experiencia, y la actualización de Paint va en esa dirección. Con el modo oscuro nativo, los cuadros de diálogo modernizados y la mejora de atajos y zoom, el editor deja de ser una pieza rezagada y se integra mejor con el resto del sistema. En la práctica, trabajar con Paint ahora se siente más actual y homogéneo.
Queda claro, además, que Microsoft no busca cambiar la esencia de Paint. La herramienta sigue siendo ligera, directa y muy accesible, ideal para ediciones rápidas o anotaciones. Simplemente gana en confort y pulido: menos brillo innecesario, más control sobre el lienzo y una estética que combina con el escritorio actual.
Si todavía no ves la opción o las mejoras de zoom, ten paciencia: los despliegues pueden tardar. Mientras tanto, asegúrate de pasar por la Store y por Windows Update. En cuanto te llegue, notarás que encender el oscuro en Paint —ya sea siguiendo el sistema o activándolo solo en la app— merece la pena por comodidad y coherencia visual.
Mirando el conjunto, Paint se mantiene fiel a su papel de herramienta sencilla que “te saca del apuro”, pero con el plus de un modo oscuro cómodo, un zoom mucho más útil, cuadros de diálogo al día y atajos mejor pensados. Al final, muchos pequeños detalles suman en productividad y hacen que una app de toda la vida se sienta moderna sin complicaciones.
