Si recordamos los procesos de actualización que ha encabezado Microsoft desde Windows 7, los resultados siempre se han visto entorpecidos por muchos imprevistos relacionados con la compatibilidad. Aunque muchos problemas fueron mitigándose hasta la llegada de Windows 10, los requerimientos de Windows 11 fueron un verdadero dolor de cabeza con el asunto del TPM 2.0. Esto parecía dejar fuera un enorme sector de los usuarios, sin embargo, siempre se encuentran soluciones y por ello te enseñaremos a instalar Windows 11 en un PC no compatible.
Esta posibilidad fue abierta por la misma Microsoft, que en su sitio oficial habla de 4 formas de instalar su nuevo operativo, en donde 3 de ellas son dedicadas a equipos no compatibles.
¿Qué ocurre al instalar Windows 11 en un PC no compatible?
Tras 9 meses de haberse estrenado el nuevo sistema operativo de Microsoft y abrir la puerta oficialmente para saltar los obstáculos de instalación, se han reportado diversos problemas de rendimiento. No obstante, el sistema ha logrado iniciar, por lo que vale la pena para aquellos que quieren realizar pruebas. Sin embargo, debemos resaltar que, cuando se habla de instalar Windows 11 en un ordenador no compatible, se hace referencia a los asuntos del módulo TPM.
Si tu ordenador no es compatible en aspectos como el procesador o la cantidad de memoria y almacenamiento disponible, no podrás instalar Windows 11 o en caso contrario, su rendimiento será problemático. En ese sentido, toma en cuenta que Windows 11 necesita como mínimo:
- Procesador de 2 o más núcleos de 64bits.
- 4GB de memoria RAM.
- 64GB de almacenamiento.
- UEFI con Arranque Seguro.
Formas de Instalar Windows 11 en un PC no compatible
Como mencionamos al principio, Microsoft habla de 3 formas de instalar Windows 11 en un PC no compatible y aquí los vamos a detallar para que lo hagas fácilmente. Recomendamos llevar a cabo estos procesos en entornos de prueba y no de producción, es decir, en equipos que están operando para funciones determinadas, como tu ordenador personal o el del trabajo. Para estos casos, si usan Windows 10, lo mejor es esperar a recibir la notificación a través de Windows Update.
Asistente de Instalación + Edición del Registro
Esta opción es básicamente forzar la actualización desde Windows 10 a Windows 11. El asistente de instalación no es más que el software de Microsoft que nos lleva a través de la migración hacia el nuevo sistema operativo. Sin embargo, esto se realiza desde Windows Update en los ordenadores compatibles. Pese a ello, es posible descargarlo y ejecutarlo en nuestro equipo para obtener Windows 11, aunque, previamente debemos editar el Registro de Windows.
A través de la edición del registro, forzaremos al sistema a saltar las comprobaciones referentes al módulo TPM (aunque necesitarás tener TPM 1.2 como mínimo) y CPU. Sin embargo, hay que resaltar que un error en la edición podría costarnos el funcionamiento de la instalación de Windows que tienes en este momento.
El primer paso será abrir el Editor de Registro de Windows y para ello, presiona la combinación de teclas Windows+R, escribe Regedit en la ventana emergente y presiona Enter.
Esto desplegará de inmediato el Editor de Registro.
Luego, deberás seguir la ruta hasta la siguiente clave de registro:
HKEY_LOCAL_MACHINE\SYSTEM\Setup\MoSetup
Una vez ahí, haz click derecho en un espacio vacío del lado derecho de la ventana, selecciona la opción «Nuevo» y luego haz click sobre «DWORD (32 Bits)».
El nombre debe ser el siguiente AllowUpgradesWithUnsupportedTPMOrCPU y el Valor 1.
Al finalizar, sal del Editor de Registro y luego reinicia tu ordenador.
Una vez completados estos pasos, entonces procede a la descarga del Asistente de Instalación.
A la hora de ejecutarlo, hazlo con permisos de administrador, el equipo se reiniciará y comenzará el proceso de actualización. La ventaja de hacer la actualización desde el asistente es que tendrás la posibilidad de conservar tus archivos, en lugar de borrarlo todo y hacer una instalación desde cero.
Creando un medio de instalación USB
Para instalar Windows 11 en un PC no compatible desde un medio USB, el ordenador necesitará contar con el módulo TPM en al menos su versión 1.2. Además, es de resaltar que con este mecanismo, no se harán comprobaciones referentes a la CPU, por lo que no tendrás que editar el registro.
Para comenzar, sigue este enlace y descarga la herramienta Windows 11 Creation Media. Una vez la tengas en tu PC, ejecútala para que se despliegue el asistente de creación de medios.
Acepta los términos y condiciones.
Confirma tu idioma y el del teclado.
En la pantalla para elegir qué medio se usará, elige «Unidad Flash USB«.
Selecciona la unidad de almacenamiento en la lista y haz click en «Siguiente» para comenzar con la descarga del sistema operativo y su integración en la memoria USB. Una vez finalizado el proceso, solo tendrás que reiniciar el ordenador desde la memoria USB para iniciar la instalación de Windows 11.
Creando un medio de instalación con Rufus
Otra alternativa muy recomendable es ocupar la aplicación Rufus. Esta utilidad lleva mucho tiempo siendo la joya de los técnicos para todo lo relacionado con instalar sistemas operativos, tanto Linux, como Windows. En su versión más reciente, incorpora la posibilidad de instalar Windows 11 en una PC no compatible, saltando automáticamente la comprobación de requisitos.
Para emplear este método, debes seguir este enlace y desplazarte hasta el final de la página en donde se ofrece la descarga de una imagen ISO. Cabe resaltar que, también puedes obtenerla desde la Windows Media Creation Tool, seleccionando la opción «Archivo ISO».
Cuando tengas la imagen ISO en tu equipo, sigue este enlace para descargar Rufus. La aplicación ofrece dos opciones, una que puedes instalar y otra portable, elige la que mejor se adapte a tus requerimientos.
Una vez la hayas descargado, ejecútala y haz click en el botón «Seleccionar» para elegir la imagen ISO de Windows 11 que bajaste previamente.
Luego, vamos al punto más importante que es ingresar en las Opciones de Imagen y el elegir «Extended Windows 11 Installation».
Esta es la función que ofrece Rufus para crear un USB de instalación que, además, es capaz de saltar las verificaciones de Windows 11, por lo que podrás tenerlo en equipos no compatibles. Por último, haz click en el botón «Empezar» para ejecutar la creación del USB booteable.
Al finalizar, solo tendrás que iniciar el ordenador desde la memoria USB y seguir los pasos de la instalación de Windows 11.