Una buena suite ofimática es el complemento perfecto para cualquier sistema operativo, incluido Windows. Esto lo apreció bastante rápido Bill Gates que desde casi los inicios de Microsoft y de la era Windows, lanzó una suite ofimática llamada Microsoft Office.
Este programa no es sólo uno de los más famosos de la Historia de la Informática sino que también ha sido el más pirateado de la Historia, pues su necesidad y su precio no estaban muy igualados. Sin embargo, actualmente existen muchas buenas alternativas a Microsoft Office, por si no podemos permitirnos pagar el paquete básico de Office. La más famosa de todas ellas se llama LibreOffice, una suite ofimática tan buena como Microsoft Office pero que es gratuita y libre.
Este suite ofimática nació como una alternativa para los sistemas operativos Gnu/Linux pero su éxito ha sobrepasado a estos sistemas operativos llegando a las versiones de Microsoft Windows. Su obtención e instalación en Windows es sencilla y podemos tener una suite ofimática sin desembolsar grandes cantidades de dinero para ello.
Para tener Libreoffice en nuestro equipo con Windows, primero hemos de ir a la web oficial de Libreoffice en castellano y bajarnos el paquete de instalación. En el momento de su descarga nos pedirá amablemente una donación para el proyecto, que podemos realizar o bien omitir, lo que prefiramos.
Ya tenemos nuestro paquete de instalación y sólo hemos de ejecutarlo para que comience la instalación de LibreOffice.
Se realiza mediante un asistente que nos guiará en todo paso, el asistente está en castellano por lo que será fácil de seguir. Antes de proceder a la instalación, el asistente nos preguntará que queremos hacer, si una instalación típica o una instalación personalizada.
La primera es más rápida pues no nos preguntará nada, pero si elegimos la personalizada hemos de seleccionar la carpeta de destino, los programas que se instalarán, fuentes, etc… Una vez elegido, pulsamos siguiente y se nos preguntará si queremos que LibreOffice sea el programa predeterminado para los documentos de Microsoft Word, Excel, Powerpoint o Visio.
Esta pantalla sólo saldrá si en nuestro equipo está o ha estado una instalación de Microsoft Office, sino no preguntará; además se nos preguntará si queremos un acceso directo en nuestro escritorio, algo ya típico en las instalaciones de programas para Windows. Una vez que hemos seleccionado la configuración correspondiente, pulsamos el botón siguiente y comenzará la instalación de archivos en nuestro ordenador.
A su término, se nos dirá que todo ha terminado y que pulsemos el botón finalizar. Una vez que hemos finalizado la instalación, podemos ver como en el Menú de Inicio de Windows ya tenemos una carpeta con el nombre de LibreOffice.
En esta nueva entrada del Menú de Inicio encontramos una de serie programas que equivalen a las distintas aplicaciones de la suite ofimática. Así,
- Libreoffice Writer es un procesador de textos.
- Libreoffice Calc es una hoja de cálculo.
- LibreOffice Impress es un programa de presentaciones ( PowerPoint)
- LibreOffice Base es una base de datos.
- LibreOffice Math es un editor de códigos y fórmulas matemáticas.
- LibreOffice Draw es un editor de imágenes.
Cómo podéis ver, LibreOffice ofrece lo mismo que Microsoft Office, pero de manera gratuita y sin tener que pagar una licencia alta por ello. Sin embargo, si necesitamos prestaciones altas o utilizar macros en nuestros documentos, lamentablemente tendremos que elegir Microsoft Office. Personalmente he probado las dos suites ofimáticas y ambas son buenas, muy buenas, siendo LibreOffice una gran alternativa ¿ vosotros qué pensáis?
Este artículo es del año 2016 (por más que busqué, no encontré la fecha, tuve que usar google para saber cuándo se publicó esto, lo digo por si alguien como yo quiere saber la fecha de publicación)