Microsoft Office es la suite ofimática «oficial» que viene instalada en todos los dispositivos Windows. Es un producto muy completo, considerado hoy ya un estándar. Y es de pago. Hace algún tiempo OpenOffice apareció como una alternativa completamente gratuita y de código abierto, convirtiéndose pronto en la favorita de millones de usuarios en todo el mundo, especialmente de los amantes del software libre. ¿Qué es OpenOffice exactamente? Te contamos aquí su historia y otros detalles que te interesará conocer.
La primera (y lógica) pregunta que nos surge cuando pensamos en OpenOffice es por qué es gratis. No existe ninguna explicación para diseñar una suite de ofimática de calidad y distribuirla sin cobrar nada por ello. ¿Dónde está el beneficio? Bueno, esa es la filosofía del software libre…
Breve historia de OpenOffice
La historia de OpenOffice se inicia en 1992, con el lanzamiento de una primera versión, todavía muy rudimentaria, a manos de sus creadores, Star Division. Aquel primer programa ofimático se llamó Star Office, el antecedente directo del OpenOffice que conocimos después.
Pero el verdadero paquete ofimático tal y como lo conocemos hoy, llegaría en 1996 gracias al soporte para Linux añadido. OpenOffice se convertía de este modo en la suite de ofimática disponible para una mayor variedad de sistemas operativos.
Este ambicioso proyecto de código abierto siguió creciendo con la creación de la web OpenOffice.org, ya en el año 2000. Aquello inició el periodo de máximo esplendor de la idea. Solo unos años después se alcanzó la cifra de 20 millones de descargas y OpenOffice, disponible en 110 idiomas, se usaba en ordenadores con Windows, Mac y Linux. Eso sí, en ningún momento se llegó a amenazar la hegemonía de Microsoft Office.
En 2009 el destino del proyecto da un giro cuando Oracle compra el 30% de OpenOffice (la parte perteneciente a Sun Microsystems, el principal desarrollador de OpenOffice). Un año más tarde, algunos de los más destacados miembros de la comunidad, descontentos con el nuevo rumbo que había tomado el proyecto, pusieron en marcha por su cuenta Libre Office, una suite que recuperaba la esencia original de OpenOffice. Hubo algunos intentos en vano de acabar con este cisma, sin éxito hasta hoy.
Así que en la actualidad nos encontramos con que OpenOffice, hoy en manos de Apache, es un proyecto estancado sobre el que planea la sombra del cierre y punto final.
Aplicaciones de Open Office
A pesar de los problemas sufridos durante los últimos años, vale la pena saber qué es OpenOffice y qué es lo que ofrece a sus usuarios. El software sigue activo (su última actualización data de mayo de 2022) y sigue siendo utilizado por muchas personas y empresas en todo el mundo. Estas son las aplicaciones que forman parte de su paquete ofimático:
Writer
El procesador de textos de OpenOffice, equivalente a Microsoft Word. Writer es capaz de abrir y grabar el formato .doc, propiedad de Microsoft Word, además de otros formatos. Entre otras cosas, puede proteger documentos con contraseña, permite insertar imágenes y objetos OLE, admite firmas digitales, símbolos, fórmulas, tablas de cálculo, gráficos, hiperenlaces, marcadores, formularios, etc. También un potente editor HTML de uso sencillo.
Las versiones más recientes de OpenOffice Writer han conseguido mejorar la interfaz y han resuelto muchos problemas de compatibilidad con otros formatos.
Calc
Calc es una hoja de cálculo de OpenOffice rotalmente compatible con la aplicación Excel de Microsoft. Lo cierto es que en algunos aspectos es incluso superior a ella, por ejemplo en cuanto a la vulnerabilidad ante ciertos virus o la capacidad de realizar algunas funciones como la representación gráfica de series de datos. Aparte de esto, hay que señalar que Calc ofrece un asistente de funciones mucho más sofisticado que el de su «rival».
Impress
Desarrollado por Sun Microsystems, Impress es un programa de edición de presentaciones de diapositivas. Su funcionamiento es prácticamente idéntico al de Microsoft Office PowerPoint. Es parte de la suite de oficina de Apache OpenOffice desarrollada por Sun Microsystems. Puede crear archivos PDF y exportar presentaciones para ejecutar en cualquier ordenador que tenga Adobe Flash Player instalado. Uno de sus puntos débiles es que no cuenta con una buena oferta de plantillas de diseño.
Base
Se puede decir que Base es la versión en software libre de la popular aplicación de Microsoft Access. Una buena herramienta para llevar a cabo funciones tales como crear y modificar tablas, formularios, etc. a partir del sistema gestor de bases de datos HSQL.
Draw
Draw es un editor de gráficos vectoriales, lanzado en 2018 como alternativa gratuita a Microsoft Visio.
Math
Al igual que Microsoft Equation Edition, la aplicación Mathpermite crear y editar todo tipo de fórmulas matemáticas, tanto sencillas como complejas. Dichas fórmulas se pueden exportar a PDF e incluso a otros documentos de la suite de OpenOffice, como por ejemplo Writer.
¿Vale la pena usar OpenOffice hoy?
La respuesta a esta pregunta depende mucho de los gustos y preferencia de cada usuario. En general, podemos decir que si queremos disfrutar de las ventajas del paquete Microsoft Office sin tener que pagar nada, entonces OpenOffice es una gran opción.
Por otra parte, hay que señalar que en general la calidad y la funcionalidad de sus aplicaciones (a excepción de Calc) se han quedado un tanto anticuadas e incluso pueden presentar algún que otro fallo por falta de actualización.